El desierto argelino se inunda de solidaridad

El desierto argelino se inunda de solidaridad en la épica carrera de apoyo al pueblo saharaui.

CALCATERRA, UN CAMPEÓN DEL MUNDO EN EL DESIERTO

-El italiano se impone a Vicente Grande Duque y Jon Salvador, en una emocionante carrera, decidida en la parte final.

-La vasca María Elena Frechilla consigue un meritorio triunfo en categoría femenina, por delante de la sueca Hannerz y de Begoña Beristáin.

-El andaluz Rafael Ángel Gómez y la catalana Meri Bonet se llevan la victoria en la media maratón.

Smara (Campamentos Saharauis de Tindouf-Argelia).- El Sahara Marathon es una carrera de héroes. La mayoría son anónimos. Como el alemán Wolfgang que cada año se lía la manta y con un puñado de compatriotas viaja a correr la durísima prueba, a pesar de sus 76 años; como el Boliviano Ovidio, a quien su diabetes no le impide afrontar la carrera del desierto; como Mohamed, el corredor saharaui que perdió una pierna víctima de una explosión de mina y aún así quiso tomar parte de la carrera solidaria que reivindica la causa de su pueblo. Un total de 455 corredores que salpicaron el desierto con sus zancadas solidarias e inundaron los campamentos con su ayuda y apoyo a las familias saharauis que permanecen lejos de su país desde hace casi 42 años.

Fue una prueba dura, pero emocionante. A las altas temperaturas del desierto se sumó un viento en contra que hizo sufrir a los participantes de las 29 nacionalidades presentes. Y entre los héroes se coló todo un campeón del mundo, el italiano Giorgio Calcaterra, tres veces poseedor del cetro mundial de ultramarathon, quien se sumo a la cita solidaria y peleó como el campeón que es hasta conseguir la victoria. Fue un triunfo táctico, muy trabajado, pues tras formarse un grupo con cinco corredores en los primeros kilómetros, pronto rompió las hostilidades el madrileño Vicente Grande Duque, ganador de la última edición de esta carrera, quien puso tierra de por medio con sus rivales Calcaterra y Jon Salvador (dos veces ganador en este desierto). La suerte parecía echada, pero la hamada argelina castiga cuando menos lo esperas y Calcaterra, un viejo zorro, aprovechó para atacar al final y recuperar la distancia que Grande Duque perdía, castigado por molestias musculares. Tampoco Jon Salvador, con una contractura desde mitad de carrera, pudo repetir triunfo, pero ambos terminaron felices por estar en el podio y hacerlo flanqueando a todo un campeón del Mundo. También la competición femenina deparó una bonita carrera, pero algo antes se decantó el asunto hacia la corredora vizcaina Elena Frechilla, quien se impuso a la sueca Sara Hannerz y a la también vasca Begoña Beristáin.

En el Sahara Marathon se celebran también carreras de otras distancias y en ellas se repartieron los triunfos representantes de España, Argelia y la propia República Saharaui. En la media maratón el andaluz Rafael Ángel Gómez peleó duramente con el argelino Met Chat para hacerse con un incontestable triunfo en los últimos kilómetros. En chicas, Meri Bonet, Eva Arévalo y Marisa Guillén coparon las tres plazas del podio tras una carrera muy rápida. En la prueba de 10 kilómetros se impusieron el héroe saharaui Amaidan Salah y la española Gala Mora, mientras que en los 5 kilómetros ganaban Roberto Gracia y la local Nasrala Salem.

La delegación con mas de medio millar de personas que han acudido a esta comprometida carrera, permanecerá en los campamentos durante el resto de semana para poner en marcha las decenas de proyectos solidarios que el Sahara Marathon aporta como ayuda humanitaria y para convivir y
solidarizarse con las familias saharauis que día a día participan en su particular maratón. Los corredores lo hicieron sobre la distancia de 42 kilómetros y los saharauis en el desierto lo llevan haciendo durante los últimos 42 años. Como decía un feliz Calcaterra tras su triunfo: “He corrido muchas carreras de todo tipo, pero nada me ha hecho tan feliz como correr por la libertad.”

Calcaterra y Frechilla